viernes, 9 de enero de 2009

Frédéric Kanouté

Fotografía de AFP agencia

Es el deporte de los nuevos Santos. Mientras antes se veneraba las vidas de los hombres de Dios, ahora se venera la vida de los Ases del balón. Guapos, atléticos y millonarios, son el ejemplo a seguir por niños y mayores. Frédéric Kanouté nos ha demostrado que aparte de vivir en el limbo del lujo y la ostentación, también son de carne y hueso. Y Kanouté ha reivindicado la causa Palestina. Los que tenemos memoria recordamos que en el atentado de las torres gemelas se realizó no sé si por orden de la FIFA, UEFA o de la federación española de fútbol, un minuto de silencio por las víctimas en todos los campos del Estado Español. Ahora, el mundo del fútbol calla ante la masacre en Gaza. ¿Será verdad que los muertos no son iguales dependiendo de si te llamas Jonhhy o Hussein?

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